El estudio detallado de las espadas japonesas es un proceso difícil y demanda mucho tiempo.Hay un proceso para examinar la hoja de una espada japonesa y es usado en la practica del KANTEI NYUSATU. En las sesiones de KANTEI, se le presenta a un participante una hoja con cualquier inscripción que pueda haber en el NAKAGO cubierta y él debe adivinar el nombre del forjador. El procedimiento para KANTEI es el siguiente:Primero la SUGATA o forma de la hoja debe ser examinada.
La forma debe aparecer fuerte, la curvatura natural y el KISSEKI deben estar en proporción con el ancho y el largo de la hoja. El MUNE o lomo de la hoja también debe revisarse en su forma y altura.
Cuando se examina el SUGATA puede brindar mucha información acerca de la antigüedad de la hoja y hasta de la región donde fue hecha. De todos modos, si la hoja tiene una buena forma y es cómoda en la mano, hay una buena chance que sea de buena calidad. Es imposible que una buena espada tenga una mala forma a menos que haya sido alterada, dañada o reparada de alguna forma. Esto pasa frecuentemente y es muy importante entonces imaginarse el UBU (forma inalterada) de la hoja.La próxima área a estudiarse es el HAMON, frecuentemente conocido como el lado "templado". Aquí es donde la espada ha sido presionada para formar un área de alto contenido de carbón para mantener un lado afilado. Debe observarse en contraste con el cuerpo de la espada.
El HAMON puede tener una infinita cantidad de patrones, pero se ve de un color blanco lechoso en una espada pulida apropiadamente. El borde superior del HAMON debe estar formado por pequeños cristales de martensita llamados NIE. A veces son demasiado pequeños para verse a simple vista y entonces son llamados NIOI. El NIE y el NIOI que rodean al HAMON y forman el patrón del HAMON deben ser examinados muy de cerca, idealmente sosteniendo la hoja a nivel de los ojos y a contraluz. El NIOI-GUCHI (línea del HAMON) debe formar una línea constante y sin rupturas desde el área del MACHI (fondo de la hoja TSUBA) hasta el final de la misma.
Una ruptura en el HAMON es un serio defecto y debe ser evitada; se llama NIOI-GIRI. También es importante que el BOSHI (área del HAMON dentro del KSSEKI) cntinúe más allá del borde. Esto también es una seria falla y sólo se permite en espadas de gran importancia histórica y cultural. No se aceptan excepciones en éste punto.Si el SUGATA y el HAMON pasan la prueba, la espada debería ser buena, sin embargo, debemos asegurarnos de que la espada está hecha a mano y no astutamente producida en masa como un SHOWATO (producida en masa durante la segunda guerra mundial). Esto se asegura examinando bien el JIGANE y JIHADA.
El JIGANE es el acero con el que se hace la espada y puede mostrar sutiles cambios de color y textura mientras la JIHADA es el patrón de superficie del JIGANE causado por el proceso de forjado y acentuado por el pulido. La JIHADA aparce como vetas de madera y se describe por su tipo y tamaño (por ejemplo KO-MOKUME, "pequeña borla"). Hay muchos criterios para juzgar la calidad de la JIHADA. Sn embargo para el propósito explicativo de este ensayo, creo que basta con decir que si la JIHADA está presente es una espada forjada a mano.Mientras realizamos este minucioso examen, las fallas u errores se harán visibles. Algunas de éstas son mas aceptables que otras, dependiendo de la antigüedad de la hoja. En otras palabras, una hoja del siglo XII puede tener algunos defectos que no serían tolerados en una hoja moderna. Sin embargo, todas las fallas o falencias obviamente reducen la belleza y el valor de una hoja. Busquen agujeros o burbujas que puedan indicar aire o impurezas que fueron introducidas durante el proceso de forjado y pueden estar bajo la superficie de la hoja. También chequeen el HA-SAKI (filo) buscando rajaduras finas como cabellos que vayan del filo al HAMON llamados HA-GIRI. Estas son serias fallas producidas por el mal uso de la espada en el corte. A la altura del HA-GIRI se doblaría o quebraría.
El HA-GIRI no es aceptable bajo ninguna circunstancia.Finalmente comienza la inspección del NAKAGO. El NAKAGO en una buena espada siempre debe estar finamente terminado. El patinado debe ser de buen color y el óxido no debe ser limpiado bajo ninguna circunstancia. Si ha alguna inscripción, esta será de gran interés. Un buen MEI será cuidadosamente confidencial y hábilmente escrito, no desprolijo, tembloroso o dubitativo. Casi no interesa si alguien puede leerlo (la mayoría de los japoneses no pueden leer KANJIS antiguos en las inscripciones de las espadas) mientras el grabado se vea confiado y seguro.Por último voy a referirme a un par de puntos que pueden evitar que se cometan costos errores. La mayoría de las espadas encontradas en el Occidente son de las antes mencionadas SHOWA-TO. Estas fueron hechas en el período SHOWA (1926-1989) y la vasta mayoría fueron manufacturadas en masa por el ejército y la armada imperial durante la guerra del Pacífico.
Estas espadas no son considerada verdaderas NIHON-TO y al verse como reflejo del reciente pasado militarista japonés, todavía son ilegales en Japón.
Las SHOWA-TO son razonablemente fáciles de reconocer por sus pequeños sellos en el NAKAGO (usualemte SEKI o SHOWA) y frecuentemente están firmadas con caracteres desprolijos y poco cuidados. Frecuentemente hay una pulgada o mas sin filo (conocido como UBU-HA); es encontrado justo arriba del HABAKI. Estas pesadas y torpes espadas son encontradas usualmente en el Gunto (ejército). Generalmente atraen a los coleccionistas militares y no las recomiendo para la práctica del Iai o el serio estudio del arte japonés de las armas.Habiendo dicho esto, debo agregar que durante el período SHOWA hubo varios herreros que produjeron muy finas hojas. Hay también unas pocas hojas en Gunto que fueron hojas de familia hechas tradicionalmente.